lunes, marzo 23, 2009

La lección del elefante


Seis varones del Indostán, muy dados a aprender, fueron a ver al elefante (aunque todos ellos eran ciegos), para satisfacer la curiosidad de su mente.

El primero se acercó al elefante, y al chocar con su ancho y robusto costado, enseguida comenzó a gritar: "¡El elefante es como un muro!"
El segundo al tocar un colmillo exclamó: "Vaya, ¿qué es esto tan suave, redondo y afilado? Para mí está claro que esta maravilla de elefante es como una espada"
El tercero se aproximó al animal, y al tomar entre sus manos la retorcida trompa dijo: "Ya veo, el elefante es como una serpiente"
El cuarto alargó su inquieta mano y palpó a la altura de la rodilla: "está bastante claro que a lo que más se parece esta asombrosa bestia es a un árbol"
El quinto al tocar la oreja dijo: "Hasta el más ciego puede descifrar que a lo que más se parece este animal es a un abanico"
El sexto, nada más empezar a tantear a la bestia por su oscilante cola, dijo: "Lo veo claro, el elefante es como una soga"

Y así, estos hombres del Indostán comenzaron a discutir largo y tendido, cada uno defendiendo su opinión, y cada uno tenía su parte de razón, aunque todos estaban equivocados.