-Todo lo que hiciste anoche fue una torpeza -dijo-. En primer lugar, fuiste a una fiesta a matar el tiempo, como si hubiera tiempo que matar. Eso te debilitó.
-¿Quiere usted decir que no debo ir a fiestas?
-No, no digo eso. Puedes ir donde se te antoje, pero si vas, debes aceptar la resposabilidad de ese acto.
Un guerrero vive su vida estratégicamente. Sólo asiste a una fiesta o a una reunión así, en caso de que su estrategia lo pida.
Eso significa, desde luego, que tiene un dominio total y realiza todos los actos que considera necesarios.
Viaje a Ixtlán.
Las lecciones de Don Juan.
Carlos Castaneda
Fondo de Cultura Económica
Madrid 2002