domingo, diciembre 23, 2012

Sedación popular

 González Requena (pág. 80, El Espectáculo Informativo, Madrid, Akal, 1989) es muy tajante cuando afirma que "el discurso televisivo dominante -en cuyo interior, y como uno de sus subgéneros, se inscriben los discursos informativos de mayor difusión- interpela a los individuos no como sujetos sociales, sino como espectadores, no como quienes podrían utilizar la información recibida como instrumento para su intervención en algún espacio social, sino como aquellos que, aislados de todo espacio social, encerrados en su sala de estar, hundidos en el confort de su tresillo, contemplan el incesante espectáculo del mundo".
No se ofrece, pues, una información para utilizar sino para consumir. No se pretende la acción sino la contemplación. No se busca movilizar, sino tranquilizar.
 Televisión y Educación
Joan Ferrés
Ediciones Paidós Ibérica
Barcelona 1994

martes, diciembre 11, 2012

Fines y finales

El objeto de este Establecimiento es recibir y hacer productivas las economías que se le confíen, empleándolas en los préstamos propios del Monte de Piedad y en otras inversiones autorizadas; fomentar y propagar la virtud del ahorro, considerando este ideal no como una teoría del sacrificio que constituya un deber exclusivamente para las clases humildes, sino "como una disciplina que impone un mejor uso individual y social de la riqueza"; facilitar el crédito personal y corporativo, etc.
Destina todos sus beneficios al aumento de sus reservas, que son garantía de sus imponentes; al establecimiento, fomentos y ayuda de instituciones sociales, de cultura y beneficencia. En ningún caso reparte esta institución dividendos, puesto que las utilidades se dedican a aumentar la garantía de sus imponentes, a premios o estímulos de la virtud del ahorro o bien a obras en provecho del pueblo.
Para ahorrar no es preciso privarse de lo necesario, sino prescindir de lo superfluo. - R. Iranzo.
Libreta a la Vista
de la Caja de Ahorros
y Monte de Piedad de Madrid
Abierta el 16 de Julio de 1956

lunes, diciembre 03, 2012

Vergüenza y culpa

En el curso de mi vida he observado después que aun aquellos cuyas ganancias tienen un origen lícito, gustan poco de hablar de ellas, no sólo con extraños, sino incluso con los íntimos. Probablemente se atribuye al dinero un sentido de vergüenza, o por lo menos de pudor que lo borra del número de los temas normales y lo relega entre las cosas que no está bien hablar, secretas e inconfesables; casi como si fuese mal ganado, cualquiera que sea su origen.
Pero quizá también es cierto que a nadie le agrada mostrar el sentimiento que en el ánimo despierta el dinero, sentimiento muy fuerte y que casi nunca va separado de una sobra de culpa...
La Romana
Alberto Moravia
Editorial Losada
Buenos Aires 1967

lunes, noviembre 19, 2012

Analogía para el progreso

Así, y pidiendo perdón de antemano a unos hombres que hoy tienen gran poder (y sin que lo que voy a decir deba considerarse como una paradoja), advertiré que se pueden encontrar grandes semejanzas entre la bruja antigua y el político moderno sea la que sea su filiación y el origen de su poder.
Al uno como a la otra se les atribuyen facultades muy superiores a las que en realidad tienen, son igualmente buscados en un momento de ilusión, defraudan de modo paralelo, y en última instancia los males de la sociedad se les atribuyen en bloque:
También los políticos se dice que forman sectas con consignas secretas e infames, sin más misión que la de propagar el mal, con sus juntas misteriosas y hasta sus banquetes correspondientes. Cuando son derrotados sufren procesos sensacionales, en que magistrados austeros y testigos inocentes ponen de manifiesto todas sus culpas.
Si hoy existiera la pena de la hoguera los políticos serían los más sujetos a ella. Afortunadamente (para ellos), no la hay y en los países más civilizados, cuando se les condena se les condena como la Inquisición española condenaba a las brujas en el nunca bien alabado siglo XVIII: por embaucadoras y embusteras.
Pero dejemos este paralelismo, no sin manifestar antes la ilusión de que así como ha disminuido mucho el papel de la bruja en la sociedad contemporánea llegará un día en el que se disminuirá y aun suprimirá el papel del político.
  Las brujas y su mundo
Julio Caro Baroja
Alianza Editorial
Madrid 1986

martes, noviembre 13, 2012

Ombligo de mono

 Entrar en una cueva con pinturas rupestres es como asomarse a un pozo de conocimiento muy profundo y oscuro, donde por más que miras no consigues ver el fondo, pero sabes que está ahí. Y si tiras una piedra, te devuelve un sonido tan extraño al oído que no consigues diferenciar entre el golpe en el fondo y el eco producido. Yo creo ver al final un espejo luminoso y redondo, con nuestro propio reflejo de mono vestido que le lanza piedras a la luna.
Me pregunto al precio de desaprender qué aprendimos a ser lo que somos. Esa mirada limpia a los bisontes del genio de Altamira contrasta con la torpeza mostrada al representar la figura humana, que es, sin embargo, el centro del dibujo en el Homo Sapiens del siglo XXI.
Ese pozo oscuro está en nuestros corazones, y es nuestra naturaleza. Y al fondo hay un ombligo enorme al que miramos con visión, no de pozo, sino de túnel.

lunes, noviembre 05, 2012

Palabras que son piedras

En los últimos meses ha aparecido misteriosamente una colección de expresiones verbales disfrazadas de verdades a priori, imponiendo un punto de vista que, como todos los puntos de vista, deberían ser susceptibles de discutirse. Os animo a ello, con esta colección, que seguro que podéis completar en vuestras casas:
La que está cayendo. No cae del cielo. Disfrazar la crisis de fenómeno atmosférico es disfrazarlo de fortuito. Esto tendrá unas causas, digo yo. Conociéndolas, estaremos más preparados para evitarla en el futuro.
Café para todos. Con connotaciones de invitación, de ronda pagada, olvidamos que los fondos públicos tampoco caen del cielo: son nuestros impuestos.
Vivimos por encima de nuestras posibilidades ¿Cuáles son nuestras posibilidades? ¿Se refieren a las nuestras como individuos, o a las de nuestro sistema económico y social? ¿Cuáles son, en ese caso, los límites para que nuestro sistema pase a considerarse otro? bajo esta expresión parece diluírse la frontera entre derecho y lujo. Y mira que, entre uno y otro, hay un trecho. Es el trecho conocido como estado de bienestar. ¿Es a ese Estado del Bienestar al que se refieren cuando hablan de nuestras posibilidades?
 Cambio de modelo Vs. Ideas antisistema. Sistema es lo que tenemos, modelo, el sistema al que deberíamos aspirar. Quien defiende el cambio de modelo ¿no es antisistema? Quien defiende que no haya recortes, ni cambios ¿no defiende este sistema?
Recuperar la confianza de los mercados. Los inversores (no los mercados, sino los inversores, porque los mercados no toman decisiones, ni tienen sentimientos, son sólo dinámicas de compraventa), por lo general, no se fían de nadie. No puede recuperarse lo que nunca se tuvo.
Sacrificio. El sacrificio, es voluntario; si es contra la voluntad del propietario original es otra cosa. Por ejemplo,  expoliar.
 Herencia recibida. Todas las herencias son recibidas; si no lo recibes, y siempre fue tuyo, no es herencia. Desconfiad de los epítetos constantes, excepto leyendo la Odisea. Por otro lado, la herencia indica posesión. Señores gobernantes, son ustedes gestores, los propietarios somos los ciudadanos. Así que ni una cosa, ni la otra.
Reinos de Taifas En esa época (S. XI-XIII) los árabes peninsulares vivieron tiempos dorados en el desarrollo de la cultura, las artes y las ciencias, a diferencia de los tiempos que corren. Su debilitamiento vino de enfrentamientos políticos y militares, principalmente. Cada época tiene luces y sombras, y tanto de unas como de otras se puede aprender. Sin duda el mensaje pretende defender que la centralización es ventajosa económicamente. Sin embargo, algunos de los países organizados actualmente como estados federales son los que mejor están sobrellevando la crisis internacional (Estados Unidos, India, Brasil, Canadá...).

jueves, octubre 25, 2012

Pupar olvidado

 En ciertos lagos de México vive un animalejo de nombre imposible un poco parecido a la salamandra. Desde hace no sé cuántos millones de años vive allí tan tranquilo y como si nada, pero sin embargo es el titular y el responsable de una especie de escándalo biológico: porque se reproduce en estado de larva. Ahora bien, por lo que he oído decir éste es un asunto gravísimo, una herejía intorelable, un golpe bajo de la naturaleza en perjuicio de sus investigadores y legisladores.
 Total, que es como si un gusano, o mejor dicho, una oruga, una hembra quiero decir, se apareara con otro gusano, fuera fecundada y pusiese los huevos antes de convertirse en mariposa. Y de los huevos, como es natural, nacieran otras orugas.
Y entonces, ¿para qué sirve llegar a mariposa? ¿Para qué sirve convertirse en "insecto redomado"? Se podría incluso prescindir de ello.
Mariposa Angelical
Historias Naturales
Cuentos Completos
Primo Levi
El Aleph Editores
Barcelona 2009

martes, octubre 16, 2012

Miedo a soñar con alces

Hay un tipo de mujeres y de hombres jóvenes y fuertes que quieren dar sus vidas por una causa. La publicidad hace que compren ropas y coches que no necesitan. Generaciones y generaciones han desempeñados trabajos que odiaban para poder comprar cosas que no necesitan.
 Nuestra generación no ha vivido una gran guerra (...), pero nosotros sí que estamos librando una gran guerra espiritual. Hemos emprendido una gran revolución contra la cultura. La gran crisis está en nuestras vidas. Sufrimos una crisis espiritual.
 Nuestro deber es enseñar a esos hombres y mujeres la libertad a través de la esclavitud; y el coraje a través del miedo.
Napoleón se jactaba de que podía conseguir que sus hombres dieran la vida por los jirones de una bandera.
Imagínate cuando convoquemos una huelga general y todos se nieguen a trabajar hasta que redistribuyamos la riqueza del mundo.
Imagínate cazando alces por los bosques húmedos del cañón cercano a las ruinas del Rockefeller Center.
 El Club de la Lucha
Chuck Palahniuk
DeBolsillo Random House Mondadori, S. A.
Barcelona 2010

martes, octubre 02, 2012

Dificultad y equilibrio

 Estoy en primera fila, y sé que no tendré que terminar el examen, pero sí empezarlo, para que tenga validez para los verdaderos examinados. Sé también que es la nueva Selectividad, que complementa a la habitual y que no puntúa para elegir carrera, pero cuya nota será determinante en la vida de estos estudiantes. Alguien que posteriormente fue muy feliz, sacó un ocho y medio.
Aunque es un examen tipo test, la respuesta debe ser necesariamente un comentario de texto. Le indico al examinador que las preguntas están en latín, y que eso dificultará las cosas considerablemente, pero me contesta que no es tan grave, y que ni siquiera es verdadero latín. Efectivamente, las primeras palabras son Lorem Ipsum.
 Estamos bajo una pérgola de madera, y un tipo trajeado, con pajarita y bigote corto, muy solemne, grita indignado "Pero entonces, ¡estamos pariendo dos tipos de ciudadanos!" y sin saber por qué, le contesto "¡Te sobran cojones para poder parir ciudadanos!".
 Tomo conciencia, lentamente, de que estoy dormido mientras me alejo de la pérgola, y me asalta el recuerdo de un pensamiento extraño que me acompañó mientras pedaleaba por Europa este verano: cuanto más deprisa, cuanto más abstraído, cuanto más lejano el horizonte en el que se fija la vista, más improbable es caerse. Sostenerse en una bicicleta parada, mirando al suelo, es dificilísimo. Y, sin embargo, sólo subiéndose a una bicicleta inmóvil puede uno empezar a pedalear. 

viernes, septiembre 21, 2012

Adiós a los gigantes, o fin del capítulo sexto

 Como en una sesión de dibujo, organizamos una escena por el gusto de verla escenificada, pero en vez de dibujar, hago fotos. Alguien salta en una azotea, y la secuencia de fotos de los saltos es como un stop-motion en el que una mujer dorada, sentada en una escoba también dorada, pasa volando junto a una persona de pie, de espaldas, que no llega a darse cuenta de lo que sucede.  En otra foto alguien levita horizontal al suelo. Todas las fotos presentan una extraña factura poética que me tiene entusiasmado.

Helga se encarga de la siguiente pose. Proyecta sobre una pared imágenes de una hamburguesa de Burger King. La imagen tiene ruido de VHS deteriorado, y eso se refleja también en las fotos. A mí me parece bien, lo encuentro muy pop, pero Andy Warhol, que está junto a mí, no demuestra mucho interés. Dice que se va, porque quiere terminar Ubik, de Philip K. Dick. Efectivamente, lleva el libro en la mano. Es amarillo.
Cuando se va, le comento a Helga que me fastidia que diga eso por pura pose: estoy seguro de que ya lo ha leído, porque estas cosas de la identidad confusa le van mucho.
Me despierto. Miro el reloj. Faltan sólo veinte minutos para la hora de levantarse. Vamos a apurarlos.
Llego a mi casa. Ella me está esperando con su abrigo rojo, y me besa en el recibidor.
Suena el despertador.
Ahora, sí, empieza un nuevo día.

jueves, septiembre 13, 2012

Gigantes o cabezudos

Hay más gente esperando, en la cabaña de madera en la que proporcionan bicicletas para llegar a la rave, pero nosotros hemos decidido quedarnos a dormir en el suelo de tablones, que es bastante confortable. Un tipo con mala pinta come cucarachas vivas, y se las deja asomando en la boca antes de tragarlas, para despertar nuestra repungnancia, pero no tarda en irse.
Paula ha llegado tarde, y la han dado la última bicicleta, que se supone que es eléctrica, aunque no consigue encenderla. Tiene una vasija de cerámica en el trasportín, donde se debería iniciar una combustión, y la ayudamos con unas cabezas de fósforo que echamos dentro. Entonces, por fin, la vasija se ilumina por dentro y empieza a hacer un ruido como el de una motocicleta, y se va con los demas, pedaleando por entre los pinos. Todo tiene un aire siniestro, pero ajeno a nosotros dos, que nos quedamos allí contentos de tener la cabaña sólo para nosotros.
Sujeto a un gigante por el cuello contra la pared y, aunque hace ademán de golpearme en el costado con los puños, no tengo miedo. Al mirar abajo, sorprendido por no notar el golpe, descubro que no puede golpearme porque no tiene brazos. En realidad, no tiene cuerpo, es sólo una cabeza. Comprendo que no le cogia por el cuello amenazadoramente, sino sólo para sostenerle.

Él decide quedarse en un bar irlandés, y no ir con los demás a Zaragoza. Un cliente de donde trabajo y yo nos reuniremos con ellos allí dentro de un par de días, porque estamos esperando a que se incorpore alguien. Es un día luminoso, y nos espera un viaje festivo y agradable, en el que nos vamos a juntar muchos para pasarlo bien, aunque no sé exactamente quiénes. Nos dedicaremos a los últimos preparativos en estos dos días.
Me despierto y es de día. Por un momento creo que me he dormido y llego tarde a trabajar, pero en el móvil veo que aún me quedan cuarenta minutos para levantarme. Fenomenal. Son mis cuarenta minutos favoritos del sueño. Los últimos: como un postre.