jueves, mayo 31, 2012

Aguda grosería

En un crudo día de invierno un rebaño de puercoespines se habían apretado unos contra otros para librarse del frío, prestándose mutuamente calor. Pero apenas en contacto, sintieron el escozor de los pinchazos de sus espinas, lo que les hizo separarse.
Cuando la necesidad de calentarse les obligó de nuevo, volvió a ocurrir lo propio de modo que la lucha contra ambos sufrimientos les hizo ir de una en otra posición hasta que se encontraron a una distancia media que les hizo soportable la situación.
Del mismo modo el deseo de sociedad, nacido del vacio y la monotonía de su propio interior, empuja a unos hombres hacia otros; pero sus numerosas cualidades repelentes y sus insoportables defectos les dispersan de nuevo. La distancia media que acaban por encontrar, y gracias a lo cual la vida en común llega a ser posible, es la cortesía; son las buenas formas sociales. En Inglaterra se advierte a quien no sabe guardar la distancia: Keep your distance!
Claro que en realidad, y así las cosas, la necesidad de mutuo calórico sólo a medias queda satisfecha; pero, en cambio, no se sienten las picaduras de los pinchazos. No obstante, quien posee suficiente calórico propio, prefiere permanecer apartado de la sociedad para no darse malos tratos.
Eudemonología. Parerga y paralipómena.
Aforismos sobre la sabiduría de la vida.
Seguidos de pensamientos escogidos.

Arturo Schopenhauer
Traducción, prólogo y notas de Juan B. Bergua
Ediciones Ibéricas
Ávila, 1961