viernes, marzo 30, 2012

Adaptación y retorno

Un famoso doctor, convencido de la teoría de la adaptación de las especies a su medio, pescó un día un arenque y se propuso experimentar sus ideas. Colocóle en una pecera con agua de mar de la que cada día sacaba una cucharada para ponerle una de agua dulce. Al cabo de cierto tiempo el pez se hallaba sumergido en el agua dulce y parecía vivir muy a gusto.
 Después, durante cierto tiempo fue sacando una cucharada de agua cada día hasta que no quedó una sola gota. El pez fue trasladado entonces a una jaula donde vivió varios días completamente seco. Al arenque no pareció afectarle el cambio de ambiente y se mostraba muy jubiloso cuando el doctor le ponía la comida. 
El pez engordaba a ojos vistas, más de pronto tornóse melancólico. Un día el doctor exclamó:
- ¡Vamos, ya sé lo que le pasa! Sin duda tiene sed y he olvidado ponerle agua.
Pero ¡Oh, dolorosa sorpresa! Al otro día encontró el pez muerto: ¡se había ahogado!
Un Caso Extraordinario
No consta autor
El TBO Nº 2.451
4 Septiembre 1981
Buigas Estivill y Viña S.L.
Barcelona

lunes, marzo 26, 2012

Proyectos

Prometen ser unas vacaciones fenómenas, porque aunque la casa que hemos alquilado se cae de vieja, está construida sobre el agua del canal, y los árboles que crecen por encima filtran la luz del sol. Hay una barra en el pasillo junto a la cocina, como en casa, pero haciendo ejercicio golpeo con la cabeza el techo sin querer, y se caen las vigas que lo sostienen. La verdad es que es una buena idea, porque ahora que ha caído también parte de la pared, el pasillo se llena de luz. Mi madre está disgustada, pero con ayuda de mis primos podemos aprovechar para mejorar la distribución, e incluso reconstruir la planta de arriba: la estructura metálica está intacta, y las cristaleras se pueden montar fácilmente. La casa de enfrente es de Pepe, que se ha ido unos días a Bruselas, y nos servirá de referencia.
En alguna parte de la casa se oye a un perro gemir. No es la perra grande y vieja de pelo hirsuto que hay en un rincón oscuro del baño. Algún otro perro se cruza en mi camino, pero en silencio. La verdad es que está toda la casa llena de canes. Finalmente, en el dormitorio de mis padres, debajo de la mesita del televisor (que, por cierto, no está) encuentro un cachorro de boxer, marrón y blanco. Está cojo de una pata trasera, y es una hembra. Lo cojo con cuidado, y me lo llevo a la cocina. Ya le han dado un biberón, pero como sigue llorando, vamos a darle un poco más. Aguamos la leche rosa, porque, al fin y al cabo, ya ha comido. Tiene tanta prisa por tomarlo que se le derrama la mitad. Regaño a mi padre por darle un trozo de pan porque, además, el trozo es mío, pero no es en serio, al cachorro le viene bien irse acostumbrando a los alimentos sólidos.
Mi madre está sentada a mi lado. Se queja de que en estas vacaciones no va a hacer otra cosa que cocinar y limpiar, y que la casa está hecha un desastre. La prometo que dedicaremos un día completo a ir al puerto a dibujar los barcos, y noto que ella me lo agradece. Entre el cachorro, los arreglos de la casa, y los dibujos del puerto, no tendré tiempo de bajar ni un día a la playa, pero no me importa: todo eso son cosas que me apetece hacer.
Me despierto. Son las ocho y media.  Comprendo enseguida que es un sueño que trata de dos personas que no aparecen en él en ningún momento de manera explícita. Pero seguro que se reconocen en la bebida rosa que se derrama, y el deseo de dibujar barcos en el puerto, respectivamente.

martes, marzo 20, 2012

Hazañas de andar por casa

Define la R.A.E. hazana como "faena casera habitual y propia de la mujer", definición ésta que parece dar por sentado que, en el mejor de los casos, algunas de las faenas caseras son habituales y propias de la mujer. Como vivo solo y soy hombre, me quedo un poco preocupado, porque me veo obligado a hacer por mí mismo todas las faenas que mi casa requiere, y puede que mi hombría quede en entredicho al realizar algunas de ellas.
Con objeto de mantener mi hombría, y la otros muchos varones, fuera de toda sospecha, sólo nos quedan dos caminos: o se cambia la definición, adaptándola a la realidad actual de los quehaceres domésticos, o inventamos una nueva etimología que salve la identidad de mi género. Podríamos imaginar un origen arábigo, y no latino, como en la palabra hazaña, "acción o hecho, y especialmente hecho ilustre, señalado y heroico", considerando que la virgulilla debería dejarse en el perchero de la entrada, porque no puede tener cabida en nadie bien educado realizar tareas domésticas bajo techo con la cabeza cubierta. Y, además, ante una tarea doméstica bien hecha, hay que quitarse el sombrero.
O aún mejor: las dos opciones. Hora es ya de hacer justicia.

sábado, marzo 10, 2012

L'oportunitat d'estar d'acord

-Què fan aquesta tarda? -demanà en Montag,  amb to cansat.
Ella ja no va aixecar els ulls del guió..
 -Hi ha una obra al circuit mural d'aquí a deu minuts. Aquest matí m'han fet arribar el meu paper per correu. Vaig enviar-hi unes quantes etiquetes. Escriuen el guió amb una part en blanc. És una idea nova. El concursant, que sóc jo, ha de dir aquesta part. Quan arriben a les ratlles en blanc, tothom, des de les tres parets, em mira a mi i jo dic les línies que falten.
Aquí, per exemple, ell diu: "Què en penses d' aquesta idea, Helen?" i em mira a mi que estic asseguda aquí, al centre de l'escenari, ho entens? Llavors jo dic, jo dic... -va aturarse mentre feia córrer el dit per les línies del guió-: "Em sembla molt bé!". I llavors l'obra continua fins que ell diu: "Hi estàs d'acord, Helen?" i jo responc: "És clar que sí". Oi que és divertit, Guy?
Ell s'estaba al rebedor, mirant-se-la.
Ella digué novament:
- Ho és molt.
- De què tracta l'obra?
- So t'ho acabo de dir! Hi ha aquesta gent que es deien Bob i Ruth i Helen.
- Ah.
 Farenheit 451
Ray Bradbury
Cercle de Lectors
 Barcelona 1991

viernes, marzo 02, 2012

Apología capilar

"¡Hermana mía! ¿Cómo puedes soportar la dureza de su barba cuando se extiende sobre tu pecho y te besa, cuando te pasea los bigotes por encima de los labios y las mejillas?"
La otra replicó: "¡Necia! ¿Es que el árbol es bello sin hojas o el pepino sin sus pelillos? ¿Es que has visto en el mundo algo más horrible que un tiñoso sin pelo?
¿No te das cuenta que la barba de un hombre es como las trenzas en la mujer? ¿Cuál es la diferencia que hay entre la mejilla y la barba?
¿Es que ignoras que Dios (¡gloriado y ensalzado sea!) ha creado en el cielo un ángel que dice: '¡Gloria a Aquél que ha embellecido al hombre con la barba y a la mujer con las trenzas!'?
Si la barba no fuese algo bello, como las trenzas, no aparecerían citadas a la par, necia. ¿Cómo podría tenderme debajo de un adolescente que va más rápido que yo y que concluye antes de que yo empiece, abandonando a un hombre que cuando huele abraza, entra lentamente y cuando termina vuelve a la carga?"
Noche 424
Las Mil y Una Noches V. II
Traducción y notas de Juan Vernet
Editorial Planeta
 Barcelona, 1965