- Mira, tus discípulos están haciendo en sábado una cosa prohibida.
3 Él les respondió:
- ¿No habéis leído lo que hizo David y sus compañeros cuando estaban hambrientos? 4 Entraron en la casa de Dios y comieron los panes consagrados que no les estaba permitido comer ni a él ni a sus compañeros, sino solamente a los sacerdotes.
5 ¿No habéis leído en la ley que, en el templo y en sábado, los sacerdotes quebrantan el reposo sin incurrir en culpa? 6 Pues os digo que aquí hay alguien mayor que el templo.
7 Si comprendierais lo que significa: misericordia quiero, y no sacrificios, no condenaríais a los inocentes. 8 Porque el Hombre es Señor del Sábado.
Mt 12, 2-8
Biblia del peregrino
Traducción dirigida por
Luis Alonso Schökel
Ediciones Mensajero
Bilbao 2009